Mindfulness aquí, mindfulness allá, mindfulness en todos lados. Seguramente has escuchado este concepto en más de una ocasión pero ¿sabes de qué trata? Y más importante, ¿sabes cómo implementarlo en tu trabajo? Descubre aquí las top 5 formas de hacerlo.
¿Qué es mindfulness?
El mindfulness, o en español “Plena Conciencia”, “Atención Plena” y similares, no es un término nuevo; esta palabra desciende del pali, idioma que se hablaba hace más de dos siglos y, en pocas palabras, describe el estar en el presente de manera consciente.
¿No te suena? Piensa, por ejemplo, en todas aquellas veces en las que estás en todo menos en el ahora; preocupado por algo que pasó de camino a la oficina o ansioso por la presentación con los inversionistas dentro de una semana y mientras tanto, no le prestas atención a lo que estás haciendo en el momento. ¡Es hora de ponerle un alto a esto!
Beneficios de practicar el mindfulness
Si sientes que el mindfulness no es para ti porque suena demasiado yogui y eso choca con tu personalidad, es posible que cambies de opinión cuando descubras los beneficios que, estar en el presente, conlleva.
Incluir el mindfulness en el día a día podría ayudarte a:
- Manejar la ansiedad o la depresión.
- Mejorar tu capacidad de retención.
- Aumentar tu concentración.
- Desarrollar tu inteligencia emocional.
Bueno y el mindfulness ¿con qué se come? Hay quien cree que este concepto es intercambiable con “meditar”, pero debemos aclarar que no es lo mismo. Quizás la forma más fácil de entender las diferencias es recordar que la meditación es una práctica con la que se pueden desarrollar diferentes cualidades, como estar presente conscientemente a.k.a. mindfulness.
Top 5 formas de implementar el mindfulness en el trabajo
Independientemente de si llevas tu emprendimiento desde tu casa o una oficia, hay un factor que no falta en ninguno de estos sitios: el estrés. Si bien, se recomiendan diferentes maneras de manejarlo, hay una estrategia que casi siempre pasa desapercibida en estos consejos, ¿has descubierto cuál es?
Evidentemente estamos hablando del mindfulness, que como ya dijimos, no es igual a meditar y es que, ¿quién puede hacer malabares con los mil pendientes del trabajo, juntas con stakeholders, comer a sus horas, dormir lo necesario y ADEMÁS meditar y salir victorioso? No somos superhéroes pero implementando el mindfulness, verás cómo mejoran tus días.
Integrar esta práctica al ámbito laboral es más fácil de lo que crees, ¿no nos crees? Échale un ojo a estas top 5 formas de hacerlo:
Comienza tu día con una intención
¿Alguna vez te has preguntado qué quieres lograr en el día, antes de empezar tus actividades? Tanto si lo has hecho, como si no, proponte estar presente y toma unos minutos para fijar esto en tu mente.
Si a lo largo de la jornada notas que te distraes y comienzas a divagar, trata de regresar a lo que estás haciendo. Evita trabajar automáticamente, aún si la tarea que estás haciendo es muy mecánica; enfoca tu atención en lo que está pasando, esto evitará que cometas errores, además de que podrías disfrutar de la acción. Win-win!
Una tarea a la vez
Admitámoslo: los hábitos poco saludables son celebrados. ¿Estás al pendiente de dos celulares al mismo tiempo?, ¿Tomas llamadas cuando estás en una reunión?, ¿Contestas correos mientras escuchas una presentación?
Es fácil dejarse llevar y tratar de realizar dos o más tareas simultáneamente, pero hacer esto constantemente puede que te cueste más tiempo y energía del necesario. Opta por enfocarte en una actividad a la vez, por ejemplo, trabajar en una nueva estrategia para convertir a los clientes que ya se encuentran en tu embudo de ventas.
Cuando termines, ahora sí: ¡a lo que sigue!
Pon recordatorios
Al inicio, es muy probable que te olvides de mantenerte en modo presente, ¡no te agobies! Es completamente normal. Apóyate en la tecnología para poner alarmas (obvio, que no interrumpan a los que están a tu alrededor) que te ayuden a recordar esta práctica.
¿No eres fan de las alarmas? Pon notas adhesivas en lugares que revises con frecuencia (un cajón, tu bullet journal o tu portalápices) para que al verlos regreses al mindfulness.
Invita a tus colaboradores/compañeros
Si has estado a dieta o si convives con una persona que quiere comer más saludable, sabrás que ser disciplinado con un régimen alimenticio es más sencillo cuando los que están a tu alrededor te muestran su apoyo al ser respetuosos y no comerse un pastel de chocolate frente a ti.
Algo así debe suceder con el mindfulness. Si vas a participar en una junta, invita a tus colaboradores o compañeros a mantenerse presentes; restringe en medida de lo posible el uso de computadoras y celulares (a menos que sea necesario), sugiere que todos escuchen y hablen, sé muy puntual y aprovecha al máximo el tiempo, ¡esto evitará que las sesiones se extiendan!
Agradece
Una excelente manera de conectar con el ahora es agradeciendo lo que tienes. Da gracias por tu cuerpo, por tu trabajo, por tu casa, por tus compañeros, ¡vaya! Puedes mostrar gratitud hasta por el agua que estás tomando; verás como esto mejora tu estado de ánimo.
Hay quienes buscan problemas en la solución, ¡no seas así! Trata de ver el lado positivo de la situación.
Tu cuerpo está en el presente, ¿tu mente también?