Para segmentar clientes no necesitas un proceso de clasificación complicado, solo basta con tener un método sencillo que te permita conocer mejor a tu base de contactos y organizarla de manera práctica. Así, cada grupo recibe la atención que necesita y consigues a los clientes que regresan una y otra vez.
Ahora, si nunca has segmentado tu base de clientes, no te preocupes. En este post te mostraremos cómo segmentar clientes para que puedas enviar mensajes y promociones más personalizadas, aprovechar mejor tus recursos de ventas y marketing, y aumentar tus oportunidades de cerrar más ventas.
Cómo segmentar clientes en tu negocio: paso a paso
Seguramente ya tienes una lista de clientes, pero si está desordenada, será difícil hacer que crezca. La segmentación sirve justamente para eso: agruparlos de forma sencilla y saber cómo tratarlos según sus necesidades.
Con este método paso a paso, notarás que vender y dar seguimiento a tu cartera de clientes deja de ser un dolor de cabeza:
1. Empieza con los datos de tus clientes más sencillos
Lo primero es recopilar información básica: nombre, contacto, sea celular o correo electrónico, canal por el que llegó, como WhatsApp, redes sociales, página web, y qué servicio o producto le interesa. Con esa base ya puedes empezar a diferenciar.
- Ejemplo: en tu gimnasio, un cliente se inscribe para clases de yoga y otro para entrenamiento de fuerza. Aunque ambos pagan la misma membresía, sus intereses son distintos y conviene registrarlos así desde el inicio.
2. Decide qué criterio usarás para agruparlos
Luego necesitas definir con qué criterio vas a organizarlos. Puede ser por tipo de servicio, frecuencia de consumo, etapa en el ciclo de ventas, zona de la ciudad o nivel de gasto.
- Ejemplo: un huésped reserva entre semana por motivos de trabajo, mientras que otro llega en fin de semana para descansar con su familia. Al agruparlos según motivo de viaje, el hotel puede ofrecer beneficios distintos a cada grupo.
3. Arma grupos según tu tipo de negocio
Con los criterios definidos, convierte esa información en segmentos claros. No hace falta complicarse con demasiados grupos: tres o cuatro bien pensados son suficientes para empezar.
- Ejemplo: puedes dividir a tus clientes en “Nuevas cotizaciones”, “Renovaciones próximas” y “Clientes que ya renovaron”. Así sabrás a quién enviar recordatorios, a quién dar seguimiento y a quién ofrecer productos adicionales.
4. Personaliza la forma en que te comunicas
Una vez que tienes los segmentos, no uses los mismos mensajes para todos: cambia el tono y la oferta según lo que cada grupo espera recibir. Según PuroMarketing, el 73% de los consumidores quiere que las marcas comprendan sus necesidades y les envíen mensajes personalizados.
- Ejemplo: a un estudiante nuevo podrías enviarle un correo con becas o descuentos para inscribirse. En cambio, a un exalumno, lo invitas a un diplomado más avanzado. Cada mensaje tiene sentido según el momento en que se encuentra esa persona.
5. Revisa los resultados y ajusta lo necesario
La segmentación no es algo que se hace una vez y ya. Con el tiempo vas a notar que algunos grupos funcionan mejor que otros, y ahí es cuando tienes que actualizar tu método de clasificación. Lo importante es medir qué tan bien responde cada segmento a tus mensajes y hacer cambios si hace falta.
- Ejemplo: si segmentaste a clientes frecuentes y clientes ocasionales, revisa qué promociones generan más compras en cada grupo. Si ves que los ocasionales no reaccionan mucho, tal vez necesiten otro tipo de incentivo.
Cuáles son las diferentes maneras de organizar a tus clientes
No hay una única forma de segmentar clientes. Puedes empezar con lo básico o ir más a fondo según lo que te convenga. Lo importante es ordenar tu base de clientes para hablarles con claridad y vender mejor.
Toma en cuenta este dato de Vorecol: el 80% de los compradores dice que la personalización influye en su decisión de compra. Así que sí, vale la pena segmentar con algunos de estos métodos:
- Segmentación demográfica: piensa en esta segmentación como dividir a tus clientes por características muy visibles: edad, género, ingresos o estado civil. Esta información la puedes obtener de forma natural en tu primera conversación o gracias a un formulario que deban completar a cambio de una guía gratis o descuento.
- Segmentación geográfica: aquí lo que importa es dónde están tus clientes. Puede ser tan amplio como un país o tan específico como una zona de la ciudad. Este enfoque es útil cuando la oferta cambia según la ubicación, como ofrecer combos rápidos en zonas de oficinas o promos familiares en zonas residenciales.
- Segmentación psicográfica: en este caso miramos más adentro y nos enfocamos en lo que tus clientes piensan y sienten: valores, intereses, estilo de vida o personalidad. Es entender qué mueve a tus clientes y qué los motiva a elegir una opción sobre otra.
- Segmentación conductual: aquí no importa tanto quién es el cliente, sino lo que hace: qué compra, con qué frecuencia, cuánto gasta o cómo responde a tus mensajes. Es una de las formas más efectivas porque se basa en acciones reales.
- Segmentación por canal de adquisición: se basa en identificar de dónde llegan tus clientes: redes sociales, recomendaciones, anuncios pagados o web. No es lo mismo alguien que te conoció por un anuncio de Facebook que alguien recomendado por un amigo de confianza.
- Segmentación por etapa en el ciclo de compra: aquí organizas a los clientes según el momento en que se encuentran: si apenas te conocieron, si están comparando opciones, si ya compraron o si llevan tiempo sin interactuar. No le hablas igual a alguien que recién llegó que a quien ya confía en ti desde hace años.
Cómo segmentar tus clientes rápidamente con Leadsales
Hasta aquí vimos los métodos manuales para organizar a tus clientes, pero todo ese esfuerzo puede quedarse corto si no tienes una herramienta que te ayude a aplicarlos en la práctica. Con Leadsales la segmentación es mucho más sencilla porque todo tu proceso está en un solo lugar: desde el primer contacto hasta el cierre de la venta.
1. Organiza tu proceso con embudos fáciles de usar
Uno de los retos más comunes al segmentar es perder de vista en qué etapa está cada cliente. En Leadsales eso se resuelve con embudos de venta visuales y personalizables: ves quién es un nuevo contacto, quién está en seguimiento y quién ya está a punto de comprar.
💡Ejemplo práctico
Cuando alguien pide una cotización, lo colocas en la primera columna del embudo. Si después te envía documentos o más información, lo mueves a la siguiente. Y cuando confirma la compra, lo pasas a “venta cerrada”. Así, de un vistazo, sabes dónde está cada cliente y qué necesita de ti en ese momento.
2. Clasifica con etiquetas prácticas
No todos los clientes buscan lo mismo, y para eso sirven las etiquetas. Con ellas puedes marcar a cada contacto según intereses, su perfil o la etapa en la que se encuentra. Así puedes segmentar clientes de forma rápida y agruparlos fácilmente para tus campañas.
💡Ejemplo práctico
Si ofreces cursos, podrías usar etiquetas como “Interesado en cursos online”, “Prefiere presencial” o “Exalumno”. Así, cuando lances una campaña, te enfocas solo en el grupo que realmente está interesado.
3. Conecta con mensajes personalizados en campañas masivas
Una buena segmentación solo tiene sentido si después la usas para comunicarte de forma distinta con cada grupo. Con Leadsales, envías mensajes masivos por WhatsApp usando las plantillas aprobadas por Meta, lo que asegura que lleguen bien y sin riesgo de bloqueo.
💡Ejemplo práctico
En un gimnasio, los clientes con etiqueta “Yoga” reciben una promoción de clases ilimitadas, mientras que los de “Fuerza” reciben un descuento en suplementos. Así, cada grupo recibe un mensaje pensado para ellos y tú mejoras tus resultados.
4. Detecta contactos olvidados rápidamente
Cuando manejas muchos clientes, es normal que alguno se pierda en el camino. Para evitarlo, Leadsales marca en rojo a los contactos inactivos o leads estancados, mostrándote a quién deberías dar seguimiento antes de que se enfríe la conversación.
💡Ejemplo práctico
Si un cliente pidió información sobre tarifas y no volvió a responder, aparecerá resaltado en rojo. Eso te da la oportunidad de enviarle un recordatorio con una oferta limitada y motivar la compra antes de que busque en otro lugar.
Segmenta sin complicarte y gana mejores resultados con Leadsales
Segmentar clientes es una estrategia que te ayuda a no perder oportunidades y a hablarle a cada lead de forma más directa. Lo que funciona no es hacer campañas perfectas, sino organizarte para que tus mensajes lleguen justo a quienes los necesitan.
Con Leadsales, este proceso será parte natural de tu rutina: organizas contactos en embudos, los etiquetas según su interés y les envías mensajes personalizados desde WhatsApp. Así, cada cliente recibe una atención personalizada y tú y tu equipo trabajan con menos esfuerzo y mejoran la gestión de tu negocio.
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Preguntas frecuentes (FAQ) sobre cómo segmentar clientes
¿Cuál es el mejor criterio para empezar a segmentar clientes?
No existe un criterio único que funcione para todos los negocios. Lo recomendable es comenzar con lo más sencillo: el producto o servicio que le interesa a cada cliente o la etapa en la que se encuentra (Nuevo, Activo o Inactivo). Con esa información básica ya puedes personalizar mensajes y notar resultados.
¿Cada cuánto tiempo debo revisar mis segmentos?
La segmentación no es algo que se haga una sola vez y se olvide. Los clientes cambian: hoy les interesa un producto y mañana buscan otro. Por eso tienes que revisar y actualizar la base al menos cada tres meses. Así evitas enviar mensajes desactualizados y mantienes la comunicación relevante y efectiva con cada grupo.
¿Cómo sé si mi segmentación está funcionando?
La forma más clara de saberlo es viendo la respuesta de tus clientes. Si abren más tus correos, responden mejor a tus mensajes o aumentan las conversiones y ventas, vas por buen camino. También puedes comprobar métricas clave, como la tasa de clics, el número de renovaciones o el engagement con campañas personalizadas.
