La importancia de decir no, mejorar las finanzas personales fue mi lectura de hace días en El Financiero. Me llamó la atención este artículo porque muchas veces es una palabra que tenemos dificultad para pronunciar.
Mientras leía, no pude evitar sonreír pues recordé que por la mañana estuve a punto de salir a comprar dos piezas de pan dulce (aunque no puedo asegurar que solo serían dos). Sin embargo, me detuve a pensar mis opciones y opté por tostar un pan y untarle un poco de mantequilla. Otro día iré a la panadería. Por lo pronto mi dinero se quedó en mi bolsillo.
¿Cuántas veces te ha sucedido algo similar? Nos invitan a salir y estamos muy dispuestos, hasta que vemos la cuenta. A veces compramos en volumen porque sale más “barato” pero nos descapitalizamos para comprar otros productos igual de necesarios. Hay que tener mucho cuidado con las ofertas, promociones, rebajas, ventas nocturnas y meses sin intereses. Al final se terminan acumulando.
Contenido
Ingresos contra egresos
Tal vez no seas afecto a las tablas de Excel para tus ingresos y egresos, pero te invito a emplear una para que comiences a llevar tus finanzas personales. Este ejercicio tendrá duración de un mes.
Anota TODOS tus gastos, desde los recibos hasta el refresco en la tienda de la esquina, las propinas, todo lo que implique una salida de dinero. Puedes distinguir entre pagos en efectivo o tarjeta de débito y los que pagas con tarjeta de crédito.
Al final —por lo menos me sucedió a mí— resulta que terminas con mayores egresos que ingresos ¿Cómo es posible? Esto sucede porque tal vez tenías un dinero extra del mes anterior que en lugar de ahorro se fue a gastos, además del empleo del crédito. Es momento de seguir la guía de los expertos.
Recomendaciones para tus finanzas personales
Emplea tiempo para llevar tus finanzas
Para ser ordenados en nuestros gastos tenemos que dar tiempo para analizar en qué momento estamos.
Entrepreneur recomienda sumar los activos que tienes (casa, muebles, auto, efectivo…) y luego restar los pasivos (saldos de tarjetas de crédito, hipoteca, deudas o créditos…). Esto te indicará la situación financiera real en la que estás.
No tengas miedo a hacerlo, te servirá para saber dónde estás ubicado y tomar decisiones sobre lo que tienes que hacer para estar financieramente seguro. También para buscar los medios de ahorro y lograr tus objetivos.
Aprende cómo llevar tus propósitos a la realidad
Lee textos que te ayuden a entender de manera más fácil este tema. El sitio de Educación Financiera de BBVA recomienda:
- Padre rico padre pobre – Robert T. Kiyosaki.
- Dinero: Domina el juego – Anthony Robbins.
- Las trampas del dinero – Dan Ariely.
- Principios – Ray Dalio.
- Finanzas personales para Dummies – Vicente Hernández Reche.
Lee y revisa sus estrategias y consejos, busca la manera de adaptarlos a tus requerimientos.
Termina tus deudas
Revisa tus pasivos y ve cuáles podrían cubrirse por completo. El pago mínimo en las tarjetas de crédito no te ayuda a eliminar la deuda y acumula hasta un 60% de intereses al año.
Si recibes el aguinaldo o un bono extra dedícalo de inmediato a cubrir deudas. También puedes acudir a tus acreedores para ver la manera de poder pagar lo que debes. Eso sí, es muy importante que el compromiso de pago que adquieras sea real, para que lo puedas cumplir.
Evita la tentación de gastar por anticipado, si lo haces así, podrás enfrentar gastos extraordinarios.
Revisa tu Excel
Recuerda que previamente te sugerimos armar un Excel en donde pusieras todos tus gastos. La insistencia en que sean todos es porque, en ocasiones, no consideramos el dinero suelto que traemos para comprar pequeños gratificantes; el ver sobre el papel o en la pantalla la suma de esos gastos “mínimos” te ayudará a realizar un presupuesto.
También esta tabla te puede orientar sobre cuáles hábitos de consumo tienes que cambiar; si en lugar del café de moda, te llevas un termo de tu casa. Si tienes que evitar los antojos o decir no a una salida.
Quienes se mantuvieron en casa durante la pandemia pueden dar fe de lo poco que se necesitaba para pasar el día a día, bueno, siempre que no accedieran y cayeran rendidos ante las compras en línea. Puedes estar a un clic de distancia de tener unas finanzas personales sanas.
Así que arma tu presupuesto, revisa los gastos fijos y variables, identifica cuáles puedes quitar y cuáles son indispensables. Es un análisis similar como cuando quieres administrar tu tiempo.
Ahora con tu ingreso del siguiente mes distribúyelo y agrega un apartado para ahorro, de ser posible de por lo menos un diez por ciento. “Considéralo un gasto fijo en tu presupuesto”.
Deudas que construyan patrimonio
Muchos especialistas recomiendan que una deuda funciona si es para aumentar tu patrimonio, como una casa o un auto, pero no debes emplearla para la compra de electrodomésticos o un viaje.
“Ten en cuenta que la cuota del crédito no debe superar del 20% al 30% de tus ingresos. Si no, seguro te meterás en problemas” indican en Entrepreneur.
El crédito no siempre es tu mejor aliado
La facilidad con la cual las instituciones financieras te ofrecen tarjetas o líneas de crédito adicionales para que las emplees en lo que necesites, puede provocar que de pronto te enfrentes a una deuda impagable o que te quite el sueño. Evita las tentaciones y revisa tu presupuesto primero.
Si aprendes a manejar tus tarjetas de crédito y cubres el total de lo que te indican como “pago para no generar intereses” te permitirá tener hasta 45 días para hacer el pago de un bien o servicio. Considera las fechas de corte, para que obtengas este beneficio.
Mantén a las tarjetas cubiertas y te serán de ayuda en imprevistos. Igual haz con las promociones de meses sin intereses, para que no te veas pagando un año después un artículo. Si entra en tu presupuesto y es algo necesario pues ¡Adelante!
Que trabajen tus ahorros
Revisa tus opciones, infórmate sobre los instrumentos que existen actualmente para mejorar el rendimiento.
También puedes invertir en un diplomado que genere posteriormente mayores ingresos para ti. O buscar el emprendimiento de un negocio. Si ya tienes uno, es fundamental que separes tus ingresos de los del negocio y que tu habilidad para llevar tus finanzas personales, se reflejen también en las de tu empresa.
Asegurarse es una buena inversión
Esto es definitivo, debes asegurar tus bienes y tu persona, en la medida de tus posibilidades.
Por no asegurar tu auto, puedes perder ese bien e inclusive incurrir en otros desembolsos. Revisa tus gastos, tus inversiones y busca opciones formales para adquirir los seguros que te ayudarán a tener la tranquilidad para seguir con tus planes futuros.
Toma tu tiempo y revisa cómo llevar tus finanzas personales
Descubrirás que la palabra NO te ayudará a enfrentarte a situaciones que pueden desbalancear tu economía gravemente. Revisa cómo equilibrarla para que evites que contribuya al burnout.
Te contaré algo que no es una leyenda urbana. Una persona decidió realizar la fiesta de XV años de su hija a todo lo grande y obtuvo un préstamo de una Caja de Ahorro. Después del festejo perdió algunos clientes y comenzó a tener dificultades para pagar el adeudo, buscó otros préstamos. Finalmente tuvo que vender su casa, pagó sus deudas y le quedó algo de dinero extra, pero no le permitió comprar otra casa similar.
Si aprendemos cómo llevar nuestras finanzas personales, estas historias no se repetirán. Así que ya sabes ¡Comienza hoy con tu presupuesto!
Si eres de las personas que ahorran, cumplen sus objetivos, tienen su apartado de eventos o salidas y evitan el endeudamiento ¡Felicidades! Puedes compartirnos tus experiencias.